Ninja SLUSHi: tu máquina de bebidas heladas con resultados profesionales – Review del Gadget Lab

Ninja SLUSHi: tu máquina de bebidas heladas con resultados profesionales – Review del Gadget Lab

Test sin Piedad: ★★★★★ 

Una promesa grande y divertida: convertir líquidos en bebidas heladas en casa, sin hielo ni complicaciones. Si le dedicas tiempo y paciencia, los resultados sorprenden.

Un granizado, un frappé, un batido helado…. ¿en casa? Los electrodomésticos que prometen ese placer siempre llaman la atención y la Ninja SLUSHi es una de esas que se han hecho famosas en redes sociales, donde los vídeos de bebidas cremosas aparecen por doquier. Pero como suele pasar con lo que parece ‘fácil’, hay matices. SLUSHi no es exactamente una batidora, ni solo una máquina de hielo. Es un aparato diseñado para trasformar líquidos en texturas heladas manteniendo sabor, sin necesidad de hielo añadido, pero requiere ajustes, pruebas y algo de paciencia para lograr lo que quieres en cuanto a textura, sabor y temperatura. En general funciona muy bien, pero no es un electrodoméstico “ponlo, presiónalo, lo tienes” al primer intento.

Características técnicas

  • Tipo de aparato: máquina de granizados y bebidas heladas (slush machine) con compresor.
  • Capacidad: depósito Easy-Fill de 2,5 litros pero llenado máximo recomendado de 1,9 litros para evitar problemas con la congelación.
  • Potencia / consumo: aproximadamente 200 w de potencia media.
  • Programas predefinidos: Granizado (Slush), Cóctel helado (Frozen Cocktail), Frappé (café frappé), Batido (Milkshake) y Zumo helado (Frozen Juice).
  • Tiempo de preparación: depende de la bebida, cantidad, temperatura inicial del líquido… Entre 15 y 60 minutos aproximadamente. La máquina puede tardar más si la mezcla está caliente o si la cantidad es grande.
  • Mantenimiento de frío / textura: gracias al compresor WhisperChill, la bebida se mantiene helada en buena textura hasta 12 horas.
  • Limpieza y mantenimiento: piezas extraíbles, auto-limpieza (rinse), boquilla antigoteo y bandeja de goteo.

Ninja SLUSHi – Precio

317 euros (precio a fecha octubre de 2025).


Ninja SLUSHi – Review del Gadget Lab

Probamos la Ninja SLUSHi durante varias semanas, con distintos líquidos (refrescos, zumos, leches vegetales y de vaca, cafés fríos, cócteles con fruta, incluso mezclas con algo de alcohol) para ver hasta dónde llegaba, qué ajustes hacían diferencia, dónde fallaba, etc. Antes de nada, destacar que, cuando la desempaquetamos y montamos, lo que más nos llamó la atención fue lo voluminoso que se ve el depósito, lo compacto del cuerpo con compresor incluido y esa promesa de que no necesitaría hielo para hacer algo helado cremoso. Simplemente verter líquido, elegir programa, esperar y disfrutar. Esa idea ya de entrada es atractiva: menos logística, menos preocupaciones sobre hielo, más sabor puro.

Cómo va trabajando

  • Seleccionas el programa según lo que quieras: si es un zumo de frutas, usas “zumo helado”; si es café frappé, “frapé”; etc.
  • La máquina empieza a enfriar el líquido internamente mediante su cilindro refrigerado y una barrena (o tornillo sin fin) que va empujando y moviendo el líquido congelándose poco a poco, para que la congelación sea uniforme.
  • Poco a poco se forma el slush (o granizado suave). Si llenas demasiado, o si el líquido está muy caliente, o con poco azúcar, se demora más y la textura puede salir algo líquida o con cristales grandes. Aquí es donde entra la paciencia.

Los buenos resultados

Cuando le coges el truco, los resultados son realmente agradables: bebidas cremosas/frías sin sensación de hielo grueso ni derretido rápido, con textura muy estable. Nos gustó especialmente con zumos de fruta, porque preserva bien el sabor natural sin que se “diluya” demasiado. En cócteles helados también funciona estupendamente, especialmente si la mezcla ya está refrigerada previamente. El modo batido (milkshake) da muy buenas sensaciones con leches y versiones vegetales, aunque siempre ajustando cantidad y temperatura. Hay que decir que la máquina viene con un libro de recetas; particularmente, nos parecieron todas un poco ‘prudentes’, en cuanto a que les faltaba, al final, algo de sabor. Así, añadimos más ‘potencia’ de café, tequila e ingredientes fundamentales. Y los resultados fueron progresando hasta conseguir la medalla de gloriosos. Es aquello de probar, probar, probar… Paciencia que, con tiempo, sale todo a capricho. Evidentemente, todo va por gustos.

Donde requiere tiempo, pruebas, ajustes

Porque, efectivamente, aquí es donde la SLUSHi exige compromiso: si la mezcla está muy caliente, la máquina tarda bastante más en bajar la temperatura interna y empezar a congelar. Si la proporción de azúcar es muy baja, o si usas líquidos muy diluídos (zumo con mucha agua, refresco sin azúcar, etc.), la textura puede salir floja o semi-líquida, y no ser lo suficientemente granizada o consistente. Cada vez que cambias de bebida (zumo → leche vegetal → cóctel → refresco), conviene enjuagar bien el conducto interno, quizás dejarla unos minutos para volver al ‘punto base’. Si no lo haces, sabores previos pueden mezclarse, cristalización desigual, etc.

En general: va muy bien

Pese a estos ‘peros’, hemos de decir que, en general, la experiencia es muy positiva. SLUSHi realmente cumple lo que promete: tiene buenos acabados, funciones útiles, los programas funcionan bien y, cuando todo está preparado adecuadamente, genera bebidas heladas sin esos trozos de hielo chirriantes, sin que el líquido base se degrade demasiado en sabor.

Detalles que se podrían mejorar

Aunque nos ha gustado bastante, hay dos detalles que creemos que podrían pulirse. Por un lado, la limpieza en sus rincones difíciles. Algunos usuarios comentan (y yo lo constaté) que el recipiente tiene costuras/separaciones que son complicadas de limpiar, especialmente la parte trasera del cilindro, bajo un borde donde tiende a acumularse residuo. Hay que ser muy detallista al enjuagar, usar cepillos finos o accesorios específicos. Si se descuida, puede aparecer olor o residuos feos. Por otro, el tiempo de preparación: aunque se anuncia que se puede tener un slush en tan solo 30 minutos, en la práctica muchas bebidas tardan bastante más, dependiendo de la temperatura inicial del líquido, del volumen usado, de la mezcla. Si estás deseando algo rápido, puede que te quedes con la impaciencia. Y si pides textura perfecta (granizado parejo, ni demasiado líquido ni demasiado congelado), probablemente necesites varios intentos / ajustes.

Para quién es (y para quién no)

Va de maravilla si te gusta jugar con recetas, probar sabores, ajustar mezclas; tienes paciencia para conseguir líquidos fríos, dejar que la máquina haga su trabajo, tal vez esperar más de lo que te gustaría si la mezcla no está perfecta; sueles hacer bebidas en grupo porque la capacidad es apropiada; te importa el sabor y la textura más que la inmediatez absoluta. Es

Menos ideal si quieres algo ultra rápido, del estilo “aprieto y tengo mi bebida helada ya” sin espera; te molesta mucho la limpieza fina y los ajustes (mezclado, temperatura, etc.); tienes poco espacio, poca paciencia, o solo buscas algo para “una copa ocasional”.

Conclusiones

La Ninja SLUSHi es una máquina brillante si estás dispuesto a dedicarle algo de tiempo y paciencia. No es magia instantánea, ni es algo totalmente “ponlo y ya”, pero cuando entiendes sus tiempos, ajustes y cómo preparar bien los líquidos, entrega bebidas heladas muy satisfactorias. Texturas cremosas, sabores bien conservados, sin hielo añadido… Todo lo que promete, lo cumple. Si la compras, mentalízate: necesitarás experimentar (mezcla, temperatura, volúmenes), limpiar bien, esperar variaciones, pero también disfrutarás mucho al ver cómo esa bebida que solo imaginabas sale realmente fresca, espesa, granizada… Justo como te apetece.