ZTE Nubia Air: el arte de ser ultrafino sin perder el aire premium – Review del Gadget Lab
El nuevo smartphone de ZTE llega con una misión ambiciosa: ser de los más delgados sin renunciar a potencia, batería… ni precio accesible. ¿Lo consigue?

La moda de los móviles ultrafinos viene con fuerza. Tras unos años en los que las marcas parecían competir por quién tenía la cámara más grande o la batería más monstruosa, ahora el objetivo es otro: ser lo más elegante, liviano y delgado posible. El ZTE Nubia Air representa esa filosofía a la perfección. Sin embargo, hay una contradicción inherente en esta tendencia. Estos móviles son un placer a la vista y al tacto… hasta que se te escapan de las manos. Son tan ligeros y lisos que a veces parecen hechos para deslizarse por sí solos. Surge entonces el dilema: ¿ponerle una funda para evitar el susto, aun sabiendo que arruinas su silueta minimalista? ¿O usarlo ‘a pelo’ y confiar en no dejarlo caer jamás? El Nubia Air es un ejemplo brillante de esa dualidad entre diseño y funcionalidad. Vamos a conocerlo a fondo.

ZTE Nubia Air – Características técnicas principales
- Grosor: 6,7 mm (5,9 mm en el marco central).
- Pantalla: AMOLED de 6,78” con resolución 1.5K y tasa de refresco de 120 Hz.
- Procesador: Unisoc T8300 (6 nm) a 2,2 GHz.
- Memoria RAM: 8 GB (expandible virtualmente hasta 20 GB).
- Almacenamiento: 256 GB.
- Cámara principal: dual de 50 Mp f/1.6 y de profundidad de 2 Mp.
- Cámara frontal: 20 Mp.
- Batería: 5.000 mAh con carga rápida de 33 w.
- Peso: 172 gr.
- Resistencia: IP68 / IP69 / IP69K.
- Pantalla protegida con: Corning Gorilla Glass 7i.
- Sistema operativo: MyOS basado en Android 15.

ZTE Nubia Air – precio
199 euros (precio a fecha octubre de 2025).
ZTE Nubia Air – Review del Gadget Lab
Desde el primer momento que lo sostienes, el Nubia Air sorprende. No parece un teléfono, sino una lámina metálica con pantalla. Su perfil de menos de 7 mm hace que desaparezca casi en el bolsillo y su construcción metálica transmite una sensación de elegancia sobria, moderna y cuidada.
El acabado es impecable: bordes suavemente redondeados, marco brillante y un panel frontal que ocupa casi toda la superficie. A pesar de su extrema delgadez, el teléfono no cruje ni se dobla, algo que uno teme al ver un diseño tan minimalista. ZTE ha reforzado la estructura con una aleación interna que mantiene la rigidez incluso bajo presión.
La pantalla AMOLED es otro punto fuerte. Los colores son vivos, el brillo se ajusta bien incluso en exteriores, y los 120 Hz de refresco hacen que todo se mueva con una suavidad deliciosa. Ver vídeos o desplazarte por redes sociales se siente ágil, fluido, casi ‘líquido’.

Rendimiento
En rendimiento, el procesador Unisoc T8300 ofrece más de lo que su nombre podría sugerir. No es un chip de gama alta, pero en el uso real cumple de sobra: navegación fluida, multitarea básica sin tirones y juegos medianamente exigentes corriendo sin dramas. MyOS, la capa de ZTE basada en Android 15, se comporta con solvencia y sin exceso de apps preinstaladas.
Sistema fotográfico
La cámara principal de 50 Mp capta imágenes nítidas y bien equilibradas, especialmente con buena luz. De noche, el modo automático cumple, aunque aquí se nota que el procesado aún puede mejorar un poco. La cámara frontal de 20 Mp es ideal para videollamadas y selfies, con un nivel de detalle más que digno.

Autonomía y resistencia
La batería de 5.000 mAh es todo un logro dentro de un cuerpo tan fino. Aguanta el día completo sin problema, incluso con uso intensivo. La carga rápida de 33 w no es la más veloz del mercado, pero recarga suficiente en menos de una hora y media.
En el apartado de resistencia, ZTE ha ido más allá: el Nubia Air presume de certificaciones IP68, IP69 e IP69K, una rareza en móviles de diseño. En otras palabras: puedes mojarlo, salpicarlo o usarlo bajo la lluvia sin miedo.
Detalles a mejorar
- Audio justito. Aunque los altavoces son correctos, el sonido carece de profundidad y se nota algo plano a volumen alto. Unos drivers más potentes o un refuerzo de graves le vendrían bien.
- Procesador correcto, no brillante. Para tareas cotidianas es impecable, pero los jugadores notarán los límites del Unisoc T8300 en títulos algo pesados y los usuarios en general, en multitarea intensiva.
Conclusiones
La delgadez tiene su encanto y su precio (no siempre en términos económicos). El ZTE Nubia Air no pretende ser el móvil más potente del mundo, sino el más equilibrado entre estilo y funcionalidad. Y en eso, acierta de pleno. Su diseño ultrafino y ligero es un imán para quienes valoran la estética tanto como el rendimiento. Sin embargo, esa misma virtud es su pequeño peligro: un descuido y puede acabar resbalando de la mano. Si decides ponerle funda, perderás parte de su encanto visual; si no, vivirás con el miedo a la caída fatal. En cualquier caso, el Nubia Air logra algo difícil: ser un móvil bonito, funcional y sorprendentemente completo por unos no menos sorprendentes 200 euros. Es la demostración de que la delgadez no siempre implica fragilidad… Aunque sigue siendo recomendable sostenerlo con cuidado.




























